Microcuentos: reescrito 3
Para poder comprender mejor estos microcuentos, les recomiendo que se pasen primero por la entrada "microcuentos".
1. Género de Magos y Hechiceros.
"el camino para volver a ser un simple mortal"
Merlín hubiera sido una gran bruja. En su sangre corría la fuerza y el potencial para serlo. Sus padres, Agnes y Gerard, brujos legendarios de Lombardied, le transmitieron todo el conocimiento que debería saber. Pero para poder proclamarse como bruja, Merlín debería hacer un sacrificio. Debería cazar y asesinar a un niño o niña y luego prender fuego su cuerpo. El humo sería el símbolo que daría comienzo a su vida como bruja. Pero Merlín no estaba preparada para hacerlo, a pesar que su destino era ser bruja, ella solo quería ser una simple mortal.
La noche de su proclamación ella decidió no hacer caso a las reglas. Agarró el libro mayor de los hechizos, el más importante que había en Lombardied y se quemó en llamas aferrada a el.
El humo dio a entender que su sacrificio ya estaba hecho, así que sus padres y las demás brujas se encaminaron hacia el lugar de los hechos. Pero lo que encontraron no era lo que esperaban. El libro mayor de los hechizos y ella estaban hechas cenizas.
Al costado de las cenizas estaba la tapa arrancada del libro mayor de los hechizos con el último mensaje de Merlín, que decía:
"no pude ser lo que querían, y tampoco lo que yo deseaba, de esta manera determino cambiar la historia para que cada persona tenga la posibilidad de elegir, ser lo que tenga que ser, o ser un simple mortal".
2. Género maravilloso.
2. Género maravilloso.
"como siempre lo imaginaste"
Erase una vez una vez en un lugar muy lejano, una niña de cabello rizado y rubio, llamada Giselle, que desde muy pequeña permanece encerrada en una diminuta cabaña junto a sus padres, alejada de toda el pueblo. Su familia decidió que esa era la única manera de protegerla de las personas y animales que la buscaban. Ella portaba un horrible hechizo. Si te tocaba morías al instante. En sus primero años de vida, antes que la escondieran, ella asesinó a muchas personas, logrando desatar la furia del pueblo.
Con el paso de los años todo el pueblo estuvo organizado y concentrado para buscarla y terminar con ella, mas nunca la hallaron.
A medida que fue creciendo, Giselle aprendió a controlar su poder y ya se sentía una niña normal, pero nunca lo seria.
Con 16 años, Giselle decidió escaparse de la cabaña en donde se había criado, con la esperanza de poder persuadir al pueblo de que ella ya no era peligrosa.
Cuando logró llegar, nadie la reconocía. Creyó que no haría falta explicar quién era e imaginó que podría quedarse allí tranquilamente. Pero algo horrible sucedió; un niño se tropezó y empujó a Giselle, pronto la tocó, el niño comenzó a quedarse sin aire, finalizando con su muerte. El pueblo espantado comprendió quien realmente era y con el grito al cielo de "Muerte a la embrujada" comenzaron a perseguirla. Ancianos, niños, adultos y animales la acorralaron y empezaron a gritarle aun más. "Quémenla", "Dale con el palo", "Primero tortúrenla", "A la horca".
Por la cabeza de Giselle lo único que pasaba era terror y angustia. Su cuerpo empezó a tensarse, sus ojos se cerraron y junto al grito de "YA BASTA", todos las voces de la muchedumbre se silenciaron.
"No soy peligrosa..., no soy peligrosa..." decía mientras lloraba. Pero al abrir los ojos, logró ver que el silencio del pueblo, no era más que la muerte de los mismos. Lo único que consiguió decir fue "Esto no era lo que yo quería, ni lo imaginaba".
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